Con 70 años de trayectoria en el mercado argentino, Codini supo adaptarse a los vaivenes económicos y consolidarse como un actor clave en la industria de electrodomésticos. Javier Codini, quien lidera la compañía juntos a sus hermanos Pablo, Rafael y Patricia, detalló el proceso de profesionalización de la empresa, las estrategias comerciales que están encarando y sus proyecciones a futuro.
Desde hace tres años, la empresa inició un proceso de profesionalización que se formalizó hace dos. «Cuando mis padres dejaron de estar en la empresa, la primera pregunta fue cómo hacer para que Codini pueda trascender en el tiempo sin que haya un Codini directo en cada área operativa«, señala el presidente.
Este proceso incluyó la contratación de profesionales con vasta experiencia en la industria. «Hoy tenemos en el equipo personas que trabajaron en empresas como Frávega y LG, aportando su conocimiento y permitiendo que la compañía evolucione», agrega Codini. Además, la familia ha asumido un rol más estratégico, participando principalmente en reuniones mensuales.
La visión a largo plazo es que, en 20 o 30 años, las decisiones de la empresa no dependan de la familia, sino del mérito y la capacidad.
Los inicios: “todo comenzó en un garage”
Fundada en 1947 por José Francisco Codini en San Francisco, Córdoba, la empresa comenzó con la reparación de maquinaria agrícola antes de diversificarse hacia la fabricación de lavarropas. A lo largo de su trayectoria, Codini ha experimentado una expansión significativa, incorporando nuevos productos como termotanques, ventiladores y hornos. En 1955, la compañía formalizó su estructura empresarial y comenzó la producción industrial de lavarropas, marcando el inicio de su consolidación en el mercado.
A lo largo de las décadas, la empresa continuó su crecimiento bajo la dirección de Héctor Codini, quien asumió en 1970 y expandió la gama de productos. En 1986, Codini ingresó a los hipermercados y grandes cadenas comerciales, lo que significó un hito clave en su distribución. En 1995, la compañía dio un paso importante al iniciar las exportaciones a Brasil, y en 1997, adquirió un terreno de 20.000 m² para establecer una nueva planta de producción.
Superando los desafíos de la crisis económica en 2001, Codini se adaptó al entorno y diversificó sus actividades, convirtiéndose en importador. En 2009, firmó un acuerdo con LG para la fabricación de lavarropas durante 10 años, consolidando su presencia en el mercado. En 2023, la compañía alcanzó una producción de 200.000 unidades anuales.
Las claves: flexibilidad y adaptación
Codini ha logrado mantenerse a lo largo de siete décadas gracias a su capacidad de adaptación. «Ser flexibles es lo que nos hizo triunfar», afirma el presidente. La empresa ajusta constantemente su producción según la demanda y las condiciones del país. «Si nos toca fabricar más, lo hacemos; si nos toca ensamblar más, también nos adaptamos», explica.
En 2024, la compañía alcanzó una facturación de $20.000 millones y proyecta un crecimiento significativo en 2025, con ingresos estimados en $30.000 millones.
Producción, ventas y expansión
Actualmente, cuenta con 224 empleados, de los cuales aproximadamente el 50% son mano de obra directa en la planta y un 20% del total son mujeres. La empresa posee una participación del 12% en el mercado nacional de electrodomésticos y exporta a Brasil, México, Paraguay, Uruguay y Bolivia. Realizan una producción anual de 100.000-120.000 lavarropas y secarropas.
La distribución de ventas por producto se divide en un 30% para secarropas, 20% lavarropas semiautomáticos, 20% lavarropas automáticos de carga frontal, 10% carga superior, y el resto entre ventiladores, pavas, hornos y otros electrodomésticos.
En cuanto a sus perspectivas de crecimiento, la empresa espera un aumento del 10% en unidades vendidas en el corto plazo, con proyecciones de hasta un 30% en el siguiente período.
Con una planta de 20.000 m² y una apuesta continua por la innovación, Codini se prepara para el lanzamiento de nuevos productos en 2025. Entre las novedades, se destacan una nueva línea de lavarropas con tecnología de eficiencia energética avanzada y termotanques con mayor capacidad de almacenamiento. Estos lanzamientos buscan reforzar la presencia de la empresa en el mercado y consolidar su liderazgo en el sector.
Además, acaba de lanzar su nuevo BIO Secarropas, un producto integra reciclaje y tecnología. Fabricado a partir de plástico 100% reciclado, se aprovecharon más de 30 toneladas de material para conformar una tanda única cerca de 10 mil unidades. La producción se realizó sin necesidad de invertir en nueva maquinaria, ya que se emplea la base del secarropa tradicional, con la incorporación de un proceso tercerizado para la recuperación de componentes.
Con miras al 2026, se proyecta ampliar la línea BIO con nuevos desarrollos que impulsen modelos de producción responsables y circulares, en respuesta a la creciente demanda del mercado por soluciones que optimicen el uso de los recursos y que marquen el futuro de la innovación en el sector de electrodomésticos.
Competencia y desafíos
El principal desafío de la industria es la competencia global. «Hoy un lavarropas de Codini compite con productos de cualquier parte del mundo. Necesitamos costos competitivos, versatilidad e innovación para destacar», sostiene el ejecutivo. Además, la volatilidad económica y los cambios constantes en regulaciones afectan la planificación a largo plazo.
Codini también enfatiza la necesidad de condiciones de competencia equitativas. «No pedimos una baja de impuestos por pedirla; lo que queremos es competir en igualdad de condiciones con cualquier país«, destaca.
Relación con el retail y enfoque en el consumidor
La relación con el retail se ha vuelto fundamental en un mercado donde la oferta supera la demanda. «Hoy debemos estar más cerca del retail en la parte comercial, marketing y logística para comunicar nuestro valor diferencial», explica Codini.
En cuanto al consumidor, la empresa ha evolucionado con sus necesidades. «Empezamos fabricando los primeros electrodomésticos del hogar y hoy ofrecemos productos con mejores prestaciones», indica. Actualmente, el 80% de sus ventas proviene de lavarropas semiautomáticos y secarropas, apuntando a un público joven que se independiza o forma su primer hogar.
