Alianza electoral: el mensaje distante de Schiaretti desorienta al Frente de Todos

Aunque fue breve, sólo 27 minutos, en lo político, el mensaje del gobernador Juan Schiaretti en la Legislatura reavivó la interna del PJ cordobés. Al resaltar el “modelo de gestión cordobés” y asegurar que tiene una “correcta” relación con la Nación, al menos en lo discursivo, el mandatario provincial marcó límites a un posible acuerdo electoral con el Frente de Todos, de cara a las elecciones legislativas de octubre.

Schiaretti deberá negociar con el presidente Alberto Fernández una posible alianza electoral para los comicios nacionales. Cristina Fernández no será ajena a esas conversaciones.

El gobernador no habla del tema, porque el diálogo con la Casa Rosada comenzará recién a fines de marzo.

El hermetismo del mandatario provincial genera inquietud en el peronismo, sobre todo, entre los eventuales aliados locales.

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Su discurso en la Legislatura sonó a distante con el Gobierno nacional. Sólo hizo dos menciones a la Casa Rosada, sin profundidad, muy lejos de cualquier alineamiento político.

“No pareció el discurso de un gobernador que está por acordar candidaturas con nosotros”, razonó el vocero de un encumbrado funcionario albertista.

El mensaje del gobernador llegó a los principales despachos de la Casa Rosada. No hubo ni habrá reacciones oficiales.

¿Qué margen dejó Schiaretti para una alianza con el Frente de Todos nacional, cuando reafirma el modelo cordobés y se muestra distante del Gobierno nacional?

Es la pregunta del millón que se hacen albertistas y cristinistas.

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Un posible acuerdo electoral dependerá de muchos factores. Desde el entorno cercano al gobernador remarcaron que hay una cuestión que sí está definida: el PJ cordobés tendrá candidatos en octubre, ya sea en alianza con el Frente de Todos o con lista propia.

Esto último ocurrió en las pasadas elecciones presidenciales, cuando Carlos Gutiérrez encabezó la boleta corta de Hacemos por Córdoba, sólo con postulantes a diputados, sin fórmula presidencial.

Los schiarettistas descartan que el gobernador no impulse a candidatos propios, como hizo José Manuel de la Sota en 2011.

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“Nuestro modelo de acuerdo electoral es el que logró en Río Cuarto: que el PJ cordobés encabece las listas. Siempre fuimos coherentes y no nos vamos a convertir en kirchneristas de un momento para otro”, argumentó un dirigente que suele expresar fielmente la postura de Schiaretti.

Pero hay una gran diferencia entre una elección municipal como fue la de Río Cuarto y una legislativa nacional, donde el Gobierno nacional se juega mucho.

Desde la otra vereda, por ahora evitando definiciones contundentes, desde el sector del albertismo que lidera el senador nacional Carlos Caserio, como del cristinismo que encabeza la diputada Gabriela Estévez, ven “poco probable” compartir listas con el PJ provincial.

Albertistas y cristinistas coinciden en la mesura, pero también en que el Frente de Todos en Córdoba debe ser la expresión del Gobierno nacional.

En un acto para cerrar el año, el 30 de diciembre pasado, Caserio marcó las condiciones para la unidad con el schiarettismo. “El Frente de Todos debe elegir a hombres y mujeres que se jueguen por el proyecto del Gobierno nacional. Tenemos que garantizar que nuestros legisladores nacionales acompañen la gestión de Alberto y de Cristina”, remarcó el senador, extitular del PJ provincial.

La suspensión de las Paso puede acelerar los tiempos

La suspensión de las primarias abiertas, simultáneas y obligatorias (Paso) que se discutirá en el Congreso Nacional marcará el ritmo de las negociaciones por las candidaturas entre la Casa Rosada y el gobernador Juan Schiaretti.

Si las Paso son suspendidas, habrá mayor margen de tiempo para comenzar una negociación para la conformación de las listas para octubre.

La suspensión de las Paso fue solicitada por los gobernadores peronistas –entre ellos, Schiaretti– con el argumento de la crisis sanitaria por el Covid. Es una estrategia que podría beneficiar al Gobierno nacional.

El presidente Alberto Fernández apostará a una recuperación de la economía y a una vacunación masiva contra el Covid y le vendría bien ganar tiempo, antes de su primer examen en las urnas.

Con el respaldo de los gobernadores peronistas, el Frente de Todos tendría los votos para suspender las Paso, pero hay una pulseada interna en el oficialismo, ya que el cristinismo duro está en contra de esta medida.

Si hay Paso en agosto como está previsto, los distintos partidos deberán presentar candidaturas el 10 de mayo y las alianzas en junio, lo que acortaría los plazos de negociación entre Schiaretti y los Fernández.

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Edición Impresa

El texto original de este artículo fue publicado el 4/02/2021 en nuestra edición impresa.

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