Validación de seguridad continua: qué es y por qué es fundamental

Qué es la validación de seguridad continua

Si pensamos en la validación de seguridad tradicional nos encontramos con ciertas limitaciones. Es una tarea compleja ya que implica una serie de pruebas para poder determinar si los controles están funcionando como deberían. Un proceso meticuloso que puede servir para fines previstos.

Ahora bien, hay que tener en cuenta que al ritmo en el que los ciberataques aumentan y evolucionan hace que no debamos conformarnos con esa seguridad tradicional. Es necesario buscar otras medidas que incrementen la seguridad.

Ahí es donde entra en juego la validación de seguridad continua. Básicamente podemos decir que se trata de una prueba continua, algo que no termina en ningún momento. No es simplemente realizar un análisis en un sistema y una vez termina se deja.

En este caso estamos ante algo continuo en el sentido de que es frecuente, de que podemos tomarlo como una ruta. Un sistema informático puede llevar a cabo una serie de tareas para controlar la seguridad. Algo que se pueda realizar cada cierto tiempo de forma continua, no necesariamente que se esté ejecutando cada segundo.

Contrasta con lo que podríamos mencionar como una rutina tradicional, en la que únicamente realiza una prueba concreta y finaliza. En este caso va más allá. De ahí que se denomine validación de seguridad continua.

Incluye componentes de la validación de seguridad tradicional

Hay que mencionar también que la validación de seguridad continua cuenta con muchos elementos de la tradicional. A fin de cuentas el objetivo es complementar, hacer que sea un proceso más constante y más perfeccionado.

Sin embargo debemos tener en cuenta que lleva el proceso un poco más allá. Asume la perspectiva de un ciberataque persistente, continuo. Los piratas informáticos buscan constantemente la manera de atacar un equipo, de poder acceder a él. De ahí que sea fundamental llevar a cabo un proceso continuo de defensa.

En otras palabras podemos indicar que la validación de seguridad continua es el paso que sigue después de que una organización ya ha establecido su sistema de seguridad, ha contratado profesionales de seguridad o un proveedor de soluciones de terceros, ha instalado dispositivos de monitoreo y herramientas de seguridad y ha capacitado a los empleados de TI y otro tipo de personal relacionado.

El objetivo es centrarse en comprobar que todo el procedimiento, todos los controles de seguridad, están funcionando correctamente. También busca la manera de conocer qué partes del sistema de seguridad requiere mejoras o reemplazos.

Sin la validación de seguridad, las organizaciones no sabrían si sus sistemas funcionan según lo previsto a menos que ocurra un ataque. Del mismo modo, no sabrían si se necesitan ajustes o cambios si no se detecta y se resuelve ningún ataque. De esta forma, se realizan pruebas y simulaciones.

Proceso continuo y variado

Pero esta validación de seguridad continua no para con uno o varios conjuntos de pruebas y resultados. Este proceso se repite para lograr realizar un seguimiento continuo del estado de los controles de seguridad. Permite tener una mayor comprensión de la situación de seguridad.

En definitiva, podemos decir que la validación de seguridad continua es un proceso que pueden llevar a cabo las empresas con el objetivo de mejorar su seguridad, de detectar posibles problemas y mantener siempre los equipos en buen estado.

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