Para hacer que una casa sea inteligente, lo más recomendable es contar con un asistente virtual, que centralice el resto de aparatos que puedas ir conectando e incorporando a tu circuito conectado. Más comodidad en casa, una vida más productiva y, en definitiva, mucho más confort e incluso seguridad, es lo que obtendrás al tener tu casa inteligente funcionando con Alexa.
¿Por qué usar Alexa para una casa inteligente?
Lo mejor de Alexa es lo fácil que es usarla y configurarla. Puedes encender las luces hasta controlar la temperatura o reproducir la música que quieras, simplemente con tu voz. Además, es compatible con muchos dispositivos distintos. Actualmente Amazon dispone de una gran cantidad de modelos con Alexa integrada, como los Amazon Echo que son los que tienen mejor calidad-precio, ya que el altavoz en sí tiene unas características muy buenas, incluso para escuchar música. Hay algunos fabricantes de routers como ASUS o NETGEAR, que también han lanzado routers o repetidores con Alexa incorporada a modo de altavoz, esto es perfecto para extender nuestra red inalámbrica, a la vez que nos proporciona todas las ventajas del asistente de voz.
Por todo esto, es una solución flexible y versátil para empezar a diseñar tu Smart Home de la mejor forma. Además, gracias a todos los desarrolladores de Skills para este asistente de voz, tendremos a nuestra disposición una gran cantidad de software adicional para controlar en detalle diferentes dispositivos. Hoy en día, la gran mayoría de dispositivos de domótica es compatible con Amazon Alexa, y es que es claramente la más usada de todos los asistentes.
Cómo crear una casa inteligente con Alexa
No tienes que ser un experto en tecnología, solo comprar los dispositivos, conectarlos a la app de Alexa, y ya puedes empezar a dar órdenes por voz para que tus dispositivos de domótica realicen ciertas acciones.
Elige los dispositivos correctos
El primer paso es tener dispositivos compatibles con Alexa. Algunos de los más comunes son bombillas inteligentes, enchufes, cámaras de seguridad y termostatos. Si quieres controlar todo con tu voz, te recomiendo empezar con productos básicos como bombillas y enchufes. Lo bueno es que, la mayoría de los productos de domótica funcionan con Alexa, por eso es perfecta para integrar todo en el mismo ecosistema.
Es muy importante que te fijes si en los diferentes productos incorporan el logo de Amazon Alexa, si lo incorporan, significa que son perfectamente compatibles y podrás usarlos sin problemas. Si no disponen de este logo en la caja, es posible que sí sean compatibles, pero con una actualización de firmware, en estos casos, tendrás que investigar bien si ese dispositivo en cuestión es compatible realmente o no lo es.
Configura tu asistente de voz
Una vez que tienes los dispositivos, hay que configurar Alexa para que los controle. Si no tienes un dispositivo Echo (como el Echo Dot), es momento de adquirir uno. Este altavoz inteligente es el centro de control para todos los dispositivos que quieras añadir a tu red. Solo necesitas descargar la app de Alexa en tu móvil, seguir los pasos de instalación y conectar tu Echo a la red WiFi de casa.
Es muy importante que tengas una red inalámbrica en casa con buena cobertura, no es necesario una gran velocidad para hacer funcionar el dispositivo, porque no consume demasiado ancho de banda, pero sí es muy importante que tenga buena cobertura y una baja latencia de la conexión.
Automatiza tareas con rutinas
Uno de los grandes beneficios de Alexa es que puede automatizar tareas cotidianas. Puedes crear «rutinas» que activen varias acciones a la vez con una orden. Por ejemplo, puedes configurar una rutina de «Buenos días» para que, al decir esa frase, se enciendan las luces, se suban las persianas y suene tu música favorita. Esto no solo mejora la comodidad de tu día a día, sino que también te permite ahorrar tiempo y energía.
Aunque un sistema de domótica como Home Assistant es mucho más avanzado en cuanto a las automatizaciones, Alexa también es muy útil, pero sobre todo, muy fácil de configurar ciertas rutinas. En el caso de que las opciones disponibles no sean suficientes, siempre podrás montarte un sistema con Home Assistant y posteriormente conectar Alexa a este sistema de domótica, para integrarlo perfectamente en el ecosistema de casa.
Seguridad en casa
Si te preocupa la seguridad de tu casa, Alexa también puede ayudarte. Con cámaras de vigilancia y sensores conectados, podrás monitorizar tu casa desde cualquier lugar. Alexa te notificará si hay actividad sospechosa y, si tienes cerraduras inteligentes, incluso puedes bloquear o desbloquear las puertas con un simple comando de voz. Dependiendo de los modelos que compres, tendremos más opciones o menos, por este motivo, es fundamental ver antes análisis de producto donde se pruebe la integración con Alexa.
Si tienes un dispositivo de Amazon con pantalla, hay cámaras IP que son perfectamente compatibles y podremos ver en tiempo real todo lo que están grabando. Esto es perfecto para montarnos un sistema de vigilancia casero, con todo integrado en el asistente de voz.
Control de energía y ahorro
Otra ventaja de usar Alexa es el ahorro energético. Conectando tus dispositivos a enchufes inteligentes, podrás apagar o encender cualquier electrodoméstico a distancia, o incluso crear rutinas para que ciertos aparatos se apaguen automáticamente cuando no los necesites. Esto no solo mejora la eficiencia de tu casa, sino que también ayuda a reducir tu factura eléctrica.
Lo mismo ocurre con los termostatos inteligentes para la calefacción, podrás encender y apagar dichos dispositivos en cualquier momento, y todo ello de forma automatizada.
Consejos adicionales
Hay otros consejos muy importantes que os vamos a dar, en el caso de que vayáis a dar el salto al hogar inteligente:
- Usa dispositivos de calidad: aunque puedes encontrar gadgets muy económicos, mejor elige productos de marcas conocidas que ofrezcan buena integración con Alexa.
- Mantén todo actualizado: asegúrate de que tanto la app de Alexa como tus dispositivos tengan el software actualizado para que no te de problemas de compatibilidad.
- Prioriza la seguridad: si vas a integrar dispositivos de seguridad, como cámaras o cerraduras, configura autenticación en dos pasos y asegúrate de tener una buena contraseña.
Como ves, hacer que tu casa sea inteligente con Alexa es una inversión que vale la pena, no solo por la comodidad, sino también por el ahorro de tiempo y energía que te da. Con estos consejos, puedes empezar a disfrutar de un hogar automatizado que se ajuste perfectamente a tus necesidades, aunque no seas un experto en tecnología.