Los dispositivos de domótica pueden ser muy útiles para la vivienda. Los hay de diferentes tipos y te ayudan a controlar aparatos, automatizar tareas o incluso ahorrar energía. Sin embargo, usar modelos antiguos, obsoletos, pueden llegar a suponer un problema. En este artículo, vamos a hablar de qué comprobaciones sencillas deberías realizar si tienes aparatos antiguos en casa, con el objetivo de evitar problemas de seguridad.
Pueden ser sensores inteligentes, enchufes, cámaras de vigilancia… Realmente, hay un amplio abanico de opciones de dispositivos de domótica que podrías tener en casa. Usarlos correctamente, va a ser imprescindible para no tener problemas de ningún tipo. Esto también incluye que estén actualizados.
Comprueba si tus aparatos son peligrosos
El problema de tener dispositivos de domótica antiguos, es que pueden no tener soporte. No van a recibir actualizaciones, por lo que podrían ser vulnerables a posibles fallos de seguridad y un atacante podría explotarlos. Esto puede comprometer tu privacidad y seguridad.
¿Reciben actualizaciones?
Lo primero que debes mirar es si esos dispositivos reciben actualizaciones. Esto es muy importante, ya que son esas actualizaciones las que pueden corregir vulnerabilidades y permitir que los aparatos sigan siendo seguros. Sin estos parches, puede haber problemas que aprovechen los atacantes.
Lo que ocurre es que muchos dispositivos antiguos ya no reciben soporte. Es decir, ya no hay actualizaciones para ellos. Quedan obsoletos y se mantienen desprotegidos ante posibles ataques que puedan aparecer.
Utiliza protocolos obsoletos
También puede pasar que esos dispositivos usen protocolos antiguos, los cuales pueden ser inseguros. Puede ser, por ejemplo, cuando no son compatibles con los protocolos de cifrado Wi-Fi más recientes, como son WPA2 y WPA3. En ese caso, no van a poder funcionar correctamente y van a estar desprotegidos.
Tener dispositivos antiguos conectados a la red, y que tengan protocolos antiguos, puede llegar a suponer un problema importante. Van a estar expuestos y eso lo pueden aprovechar los cibercriminales. El problema es que esto no depende de ti. No es algo que puedas instalar y corregir un fallo, por ejemplo. Si el aparato no es compatible con un protocolo, poco podrás hacer.
¿Puedes cambiar la contraseña de acceso?
No suele ser lo habitual, pero ocurre a veces. Los aparatos antiguos, podrían traer una contraseña predeterminada y no permitir cambiarla. Siempre vas a tener que usar esa clave que, además, suelen ser sencillas y no aportan hoy en día una protección adecuada.
Lo ideal siempre es cambiar las claves de acceso predeterminadas en todos los dispositivos de domótica. Muchas veces son contraseñas muy predecibles, del tipo 1234. Lo interesante es usar claves que sean fuertes y complejas, que tengan letras (mayúsculas y minúsculas), números y otros símbolos especiales. Evita siempre usar cosas como tu nombre, fecha de nacimiento y similares.
En definitiva, estos son algunos puntos que debes tener en cuenta si tienes aparatos antiguos de domótica y dudas de si van a ser seguros o no. Utilizar dispositivos inseguros, es un problema vital para tu privacidad. Te recomendamos siempre mantener todo actualizado y no cometer errores.