Vienen siendo semanas movidas en Almirante Brown. Claro, en medio de la incertidumbre de quien será el entrenador en lo que resta del torneo tras la salida de Fabián Nardozza -y con la no llegada de Walter Erviti, quien tenía todo acordado-, la CD trabajó en cerrar al reemplazo. Y ya llegó.
Se trata de Guillermo Szeszurak. Sí, apenas consumada su salida de Argentino de Quilmes, el experimentado entrenador de 53 años puso la firma en Isidro Casanova, y de inmediato, este miércoles estuvo presente en su primer entrenamiento.
El Búfalo viene de tener un breve paso por el conjunto de la Primera B, en el que tan solo dirigió 11 partidos: tres victorias, cuatro empates y misma cantidad de derrotas. Esta semana se resolvió su salida después de problemas internos y molestias con la CD del Mate.
La carrera de Szeszurak como técnico
Un hombre con experiencia de sobra en el Ascenso. Tras su retiro como jugador en Acassuso, el Búfalo emprendió su camino como entrenador. El primer club fue Atlas, dirigiendo la vieja Primera D desde 2008 hasta el 2010, cuando inició su primer ciclo en Argentino de Quilmes. Y en La Barranca, aquella etapa fue grata: campeón de la Primera D y ascenso a la C.
Los buenos resultados se mantuvieron, pero en el banco de Riestra. Llegó al Malevo en el 2014 y fue el deté de los históricos ascensos a la C y a la vieja B Metropolitana -en menos de un año-. También pasó por Excursionistas, Berazategui, El Porvenir, Los Andes, Laferrere, un segundo ciclo en Riestra y otros dos en el Mate.
¿Por qué se cayó la llegada de Erviti a Almirante?
Tras un flojo paso por Belgrano de Córdoba, el ex volante de Boca quedó sin club y todo parecía indicar que Isidro Casanova sería su destino. Claro, porque Erviti tenía todo acordado con Almirante, a la espera de resolver algunas cuestiones contractuales para oficializar su arribo. Pero la firma se dilató de más y la Fragata desistió.
El motivo es que tanto Erviti como su cuerpo técnico aún no terminaron de resolver algunos problemas legales que tienen que ver con la desvinculación del Pirata, equipo en el que tan solo dirigió cuatro partidos. En consencuencia, Almirante aceleró por Szeszurak y lo cerró.

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