Netflix gana 10 veces más que Disney+, pero el deporte hará que la casa de Mickey pase arriba

En el mundo del streaming la corte de la realeza está encabezada sin duda por un solo rey: Netflix, y una tropa de príncipes, condes y duques menores que buscan la corona desesperadamente. Y aún cuando parece que ese liderazgo del servicio de Ted Sarandos está asegurado por un largo tiempo, hay una kriptonita que podría echar por tierra sus triunfos: el deporte y acá un competidor acecha a lo lejos, Disney+.

Un dato para contextualizar: las ganancias operativas de Netflix en el primer trimestre fueron aproximadamente 10 veces las ganancias que Disney generó de Disney TV+ y Hulu en el mismo período. La capitalización de mercado de Netflix de alrededor de $ 492 mil millones es más que la capitalización de mercado combinada de todas las demás compañías de entretenimiento: Disney, Comcast, Warner Bros. Discovery, Paramount Global y Lionsgate.

Pero los inversores ahora están pagando una gran prima por las acciones de Netflix: el precio de las acciones se traduce en 11 veces los ingresos estimados para Netflix el próximo año en comparación con el múltiplo equivalente de 2,4 veces para Disney, según Koyfin.

El deporte de Disney+ con ESPN es el caballo de batalla

El periodista de The Information, Sahil Patel escribió una cifra decidora para el futuro del streaming: se espera que los especialistas en marketing reduzcan su gasto publicitario en programación de entretenimiento y noticias hasta en un 10% en el próximo año, mientras que se espera que la programación deportiva esté bien y suba. Esa tendencia es una buena noticia para Disney, que podría decirse que tiene más deportes en vivo que cualquier otra compañía de entretenimiento, esto por su asociación con ESPN.

El gran dilema de Netflix es el siguiente: controla los aumentos de su capital por la necesidad (muy infame para el usuario) de subir sus precios y poner más restricciones a compartir contraseñas y apuesta a la publicidad, pero una publicidad que en el mediano plazo tendrá menos valor, versus una publicidad deportiva que sólo subirá sus acciones y es ahí donde está perdiendo la batalla.

Por eso, el intento desesperado del gigante del streaming por meter con forceps el deporte: algunas peleas de boxeo, un partido de estrellas de tenis o la reciente WWE (que no sé si realmente califica como deporte o es más bien espectáculo puro).

En su newsletter The Briefing, Martin Peers, indica que «no hay muchos derechos deportivos disponibles en este momento, la mayoría están bloqueados para los próximos años. Pero en 2029, la NFL puede romper sus acuerdos televisivos existentes de una década y firmar otros nuevos, lo que podría hacer si cree que podría ganar más dinero firmando con algunos medios más nuevos».

¿Será acaso el Super Bowl o la NFL quienes puedan salvar a Netflix? ¿Podrá Disney+ seguir aumentando sus ingresos con ESPN?.

En Latinoamérica, Disney+ ya controla la emisión de todos los contenidos de ESPN con planes diferenciados: mientras más partidos, más torneos y más deportes distintos quieras ver, más dinero tendrás que desembolsar. Una estrategia, que sumado al aumento de publicidad deportiva, suena como gran negocio, sobre todo ahora que en camino viene un naciente Mundial de Clubes de fútbol, sigue teniendo los derechos en el cono sur de la Champions League y las competiciones de Conmebol y que se avecina una Copa del Mundo en Estados Unidos, México y Canadá.